Cómo poner en boca de un simple
hombre, que todo, lo que tiene Dios es suyo
El Evangelio de Juan, “La
Comunidad Joánica”; pone labios de Jesús, estas palabras
“Todo lo que tiene el Padre es
mío”
Y, tanto que lo dijese Jesús en
su vida terrena, como que La Iglesia, presidida por el discípulo Juan, La
Comunidad Joánica, llegue a esa conclusión,
es o la verdad más maravillosa, o
una burrada sin calificativos
Porque no dice, que Dios haya
hecho todo, para los seres humanos
No, dice, “Todo lo que tiene el
Padre” (Dios) es mío; y esto implica decir
“soy igual que Dios, por ello soy
Dios, tengo el mismo poder, porque soy el mismo Dios”
Sí, el que lo dice es un simple
mortal, todo lo majo que se quiera, es o una blasfemia, o palabra de un loco
Sí él no lo dijo; pero se lo
atribuyen, los locos, herejes y blasfemos son los otros
Salvo que sea verdad
Y lo es
Por qué lo atestigua la
Resurrección
Y, la Resurrección, nos la
atestiguan los mártires, los Testigos, desde esos primeros, que afrontan todo,
privaciones, mazmorras, destierros, muertes, por confesar que Jesús es el
Señor, si supieran que sólo era un hombre, a buenas horas se iban a dejar matar
Por eso, independientemente de
que lo dijese o no; porque La Iglesia también es su Voz, pone Juan en labios de
Jesús
“Todo lo que tiene el Padre es
mío”, Todo, la vida, la muerte, y nosotros cada ser humano, y como no, cada ser
vivo, por minúsculo que sea