La Carestía de la vivienda
Uno de los
problemas más acuciantes que tenemos en España es el de la vivienda.
Por un lado, el precio de venta de los pisos
es tan elevado que a los compradores no les queda más remedio que endeudarse
para toda la vida, con la hipoteca, de tener que pagar toda la vida; el piso
que cuando terminen de pagar, ya será viejo
Eso sí pueden
hacerlo, y no viene el banco a echarlos a la calle, sin impórtale que haya
niños, o viejos, y quedándose con el piso y con lo que han pagado, porque no
hay nada más despiadado que un banquero, creo sinceramente que no hay ninguno
en el purgatorio, todos tienen que estar en el infierno
Si optan por el alquiler, además de estar
expuestos a que el dueño no renueve el contrato, los contratos de nuestros
abuelos ya no existen, estará toda o casi toda su vida pagando unos precios
desorbitantes, por un piso que nunca será suyo, no pongo cifras porque varían
de ciudad a ciudad, en La Coruña menos de 600 € es casi imposible encontrar
nada, salvo que sea un estudio apartamento.
Porque ahí viene el problema, que no es que
los jóvenes tengan un piso al que poder irse y dejar la casa de sus padres.
Antes los hijos estaban en casa hasta que se
casaban si se casaban y no les pasaba nada, lo malo, lo trágico es cuando una
pareja quiere casarse, fundar un hogar, y aquí sí que es necesario que tengan
su propio piso, porque como dice el refrán “el casado case quiere”, y porque la
nueva familia necesita independencia que no aislamiento, y muchos se ven
obligados a convivir con los padres y suegros además de con cuñadas y cuñados.
Lo que hace que se resienta la intimidad de la
pareja, que si llegan los hijos estos se malcríen, no siempre claro está, pero
el riesgo esta ahí.
Si consiguen
un piso, siempre habrán de optar por un piso pequeño en donde, las camas de los
niños tendrán que ser en literas, y a la fuerza habrán de optar, les obligan a
quedarse con un hijo, o lo mucho dos porque no hay sitio, decía una señora y
eso que entonces aún la vivienda no estaba tan mal, me gustan mucho los niños,
pero me tengo que contentar con las dos niñas, porque si me viene otro y es
niño, donde lo meto, gracias a Dios ya tenía miedo cuando nació la pequeña, de
que fuera un chico.
Es decir la
carestía de la vivienda esta limitando a los matrimonios, a las parejas en su
libertad procreadora, no se les prohíbe expresamente que tengan hijos, pero se
les prohíbe de forma indirecta
Los promotores
de viviendas como todo comerciante pues están en su pleno derecho de ganar todo
lo que quieran, no se les puede pedir que se porten como cristianos en un país
que ha dejado de serlo, pero el Estado cuyo fin es la búsqueda del bien común
tiene la obligación de evitar la especulación inmobiliaria.
De evitar las
recalificaciones del suelo que de la noche a la mañana, hacen que un terreno
donde los pisos no valían nada, se convierta en un terreno millonario.
De hacer viviendas sociales dignas. De
anteponer el derecho de parejas y matrimonios a tener piso, al de los jóvenes
que se quieren ir de casa.
De dar ayudas
para las familias que no puedan pagarse una vivienda.
De otorgar a los matrimonios jóvenes que opten
por una vivienda social, un piso amplio, 4 habitaciones para que libremente
decidan si tienen un hijo, dos, ó 20 pero que no tengan que decidir en virtud
del número de dormitorios.
La Constitución dice que todos español tiene
derecho a una vivienda, eso si que lo dice, lo que no dice es que este bien
matar no nacidos, casar o unir macho y macho, hembra y hembra... todo eso que
los miembros del Partido , y los del Popular, partido han ratificado, han dicho, de eso, la pobre Constitución no
dice nada.