Dios o azar
Quién gobierna nuestras vidas, el
destino ciego, o sea el azar, o un Dios providente que respeta nuestra
libertad.
Hay personas para quienes la
casualidad es palabra que se escribe con mayúsculas; pero si eso fuera cierto,
la vida no valdría la pena; para que esforzarse, si todo, esta predeterminado o
depende de la posición de unos astros incapaces de pensar.
No creo que el azar tenga nada
que ver con mi vida, nada es casual aunque lo parezca, en todo, en cada
acontecimiento entran en juego, por un
lado, la Providencia, y por el otro mi libertad y la de los otros libertad que
Dios respeta hasta el punto de atarse
las manos.
Cada acontecimiento, cada gesto,
cada palabra, son el origen de la cadena de otros, que pueden ser decisivos no
sólo para nosotros si no cualquier otro, por ello no podemos pensar que sea porque
sí, si no que obedece al plan divino.
¿Podría alguien decir que fue
casualidad que Simón; no pescase nada
aquella noche? Sin embargo, esa no pesca, fue la causa de la Pesca mayor, y de
la elección de Pedro, por lo tanto no
pudo ser casual; como tampoco lo es
ningún hecho de nuestra vida, ni el que yo esté escribiendo ahora aquí, ni el
que tú lo leas, nada, todo es producto
de su Amor, porque somos sus “niños queridos”