viernes, 5 de abril de 2013

Rahab la meretriz

Su historia, se cuenta en  el libro de Josue

Esta mujer, como la Malinche de Cortés; es de esos personajes, que parecen,  haber nacido, para ser odiados; desde luego, nada positivo, hay  en sus vidas.

Pertenece,  a un pueblo, que será exterminado, por los hijos de Israel, es cananea,  siguiendo “su oficio”, ha recibido en su casa a unos hombres, éstos hombres son espías de Israel, espías contra su pueblo, ella los esconde en su casa, y, les ayuda a huír

El escritor del libro, dice “Dios la recompensó”

¿Qué recompenso, Dios,  la mentira, el colaborar con los asesinos de su pueblo; porque Rahab mintió, mintió a los suyos, que por su causa fueron masacrados; y, exterminados, lo mismo que Malinche traicionaría a los suyos, para ser la amante de un conquistador español, habido de riquezas y de sangre.

Oculto, en su casa al enemigo, le ayudo a escapar, y, traiciono a su patria, no soy patriota, pero los traidores me dan alergia.

Se puede decir tal vez, que su pueblo era un pueblo impío, idolatra, y, que ella ayudo al pueblo de Dios, pueblo de Dios, que también era tentado de idolatría, pero es que además su pueblo no tenía culpa, porque iba Dios a ponerse del lado, de quien colaboro con sus exterminadores; desde luego el Dios Padre de Jesús no

Y, con todo, es el Libro sagrado; el que dice que Dios la premio por ello. ¿Pero la premio, conque?

Con ver a su pueblo exterminado, salvo, sólo a su familia, pues pequeño premio, con ver sus dioses hechos trizas, y, tener que adorar,  a la fuerza un dios invisible, que parecía imponerse con el odio.

No, su premio, inmerecido como todos los que nos da Dios, el Dios Amor, fue el ser incluida en la ascendencia humana de Jesús, el que a Jesús ya antes de ser Jesús, antes de encarnarse, los pecadores ya le volviesen loco, y, aprovechase hasta lo que si fue una mala acción; pero que sólo Él conoce, lo que en realidad fue, para salvar a esta mujer pagana, y, meretriz, tal vez practicante de la prostitución sagrada que los cananeos practicaban, es muy posible, que viese en el Dios de Israel, su liberador de aquella religión donde era degradada, como persona, en un culto que en vez de elevarla a la divinidad, la bajaba a la condición de bestia, ella prostítuta a la fuerza, por servicio al templo de los demonios( los ídolos); se encontró de pronto que, podía ser otra persona, , por ello como haría más tarde la pecadora de San Lucas, decidió romper todo, y, no dudo incluso en lo que por ser algo malo, lo será siempre en traicionar a los suyos, al fin y, al cabo, ella necesitaba huir de aquel infierno, y, vivir como una persona, no le importo su pueblo, porque nadie le había enseñado que debía importarle, el suyo era un mundo; donde se ofrecían en sacrificio los primogénitos, algunas mujeres( ella era una de ellas) se prostituían para el culto de Astarte)

Por eso, Dios se compadeció de Rahab, y, como siempre ama lo que nadie quiere, lo desvalido, le busco un lugar en su Corazón.

Y, ahora esta mujer cananea, figura en la genealogía del Salvador.

Quien nació de Madre Santísima, pero fuera de eso, en lo humano, salvado su Bendita Madre,  puede decir que es Hijo, y, desciende de pecadores, como no podía ser menos; en quien, venía a rescatar los pecadores, y, llamarlos hermanos

Rahab, no merecía nada de Dios; ninguno merecemos nada, nuestros méritos, o, son los de Jesús, o, no existen, lo dejo, Él muy claro; “Quien conmigo no recoge, desparrama”