sábado, 25 de marzo de 2017

El hombre curado se puso a caminar llevando su camilla



El hombre se curó y se puso a caminar
Así concluye el milagro del paralitico, tanto el de la piscina como él que introducen sus amigos, el hombre toma su camilla,  y se marcha con ella
Si Pablo, perdón el Espíritu Santo, no hubiese dicho que todo lo que está en la Biblia, está para nuestro bien, nuestra enseñanza no le daría importancia, pero no es un libro cualquiera, es el Evangelio
¿Por qué el hombre que ha sido curado, se lleva su camilla? Ya no la necesita, en su época no se hacían donaciones;  pudo dejarla allí, que la rompiesen para  hacer leña, pero se la lleva
Y el caso es que se la lleva, por mandato de Jesús, que va incluido en el milagro, en la curación
Levántate toma tu camilla…;
Y esto me recuerda lo que Jesús dijo hace poco a los chicos, y a todos en Polonia, levántate del Sofá, si Jesús, Francisco es sólo su micrófono,  entonces el levantarse y tomar la camilla,  significa enfrentarse a aquello  que me impide, caminar hacia el encuentro con Dios, con los demás, y, conmigo misma, pero el tomar la camilla es no echar todo en el olvido, no recrearse en ello, en el pasado, eso sería seguir postrado, pero si llevarla, para recordar que si “ando” es por Jesús, si me he levantado de las caídas, grandes o pequeñas no importa, es por Él, y, para cuando vea otro en la camilla, es decir deprimido, hundido, sin fe, en noche oscura,  etc., no lo desprecie, si no que mire “mi camilla”; y sepa que también estuve así, y puedo volver a estar, que el mérito no es mío, si no suyo