La conciencia
“Todo lo que no es según
conciencia es pecado” San Pablo, claro que la Biblia de Jerusalén, traduce “conciencia" por “Ley”; por Ley interior que debe querer decir
lo mismo pero no lo sé.
La conciencia se dice que es la
voz de Dios; sin embargo esto no es enteramente cierto, de ser así, sí que
sería infalible, y habría que seguirla ciegamente, yo más bien la veo como un
susurro.
Para mi es como un equivalente
más desarrollado del instinto de los animales;
y que se resume más o menos así “tengo que defender mi vida”; por lo
tanto todo aquello que la dañe, esta mal,
pero por lo mismo tengo que defender y no puedo dañar la de otros. Ahí tenemos a lo bruto, el instinto primario
que lleva a todo el mundo a rechazar el crimen.
Luego hay que propagar la especie
Hay que alimentarse porque si no
se muere y, de ahí, nacería el concepto
de propiedad privada. Después las religiones, las ideas van formando la
conciencia del hombre y haciéndola más compleja, pero incluso en algo tan
primario como es el no matar, el hombre ha encontrado, desde siempre excusas
para cargarse este mandamiento, y de hacerlo conforme “a su conciencia”
Los sacrificios humanos, fueron
una de ellos
El aborto legal, es hoy otro
El nazismo con su raza superior,
fue otro
El Estado debería respetar la
conciencia de los individuos siempre que no dañen a otros, o al bien
común, y esto por varias cosas, pero
también porque es imposible saber, si el que ha cometido un delito, lo ha hecho
porque en conciencia lo veía así, o si lo ha hecho, porque es un delincuente; y
desde luego jamás debería dejar el destino de un inocente, al arbitrio de la
conciencia de otra persona.
Si queremos que la conciencia sea
la voz de Dios, no queda más remedio que formarla y formarla bien y
continuamente, medios, oración,
confesión, y estudio si hay más no los conozco.
Hablando de personas adultas, la
mejor forma de conciencia formada, es la que sabe que puede equivocarse y
acepta consejo de quien sabe más o tiene más autoridad
Los niños pequeños son los que se
beben la lejía, aunque ponga (digo yo, que lo deben de poner por ellos; las
botellas de lejía, la tontería “no útil para ingerir”); no lo hacen los adultos
La conciencia en un adulto;
siempre debe ser lo primero, salvo cuando este es católico y su conciencia
choca con lo que dice la Iglesia expresamente
o sea el Papa, el Concilio, no claro está un cura en un programa de la
tele, y esto por lo puesto en el blog, de “obediencia sinónimo de libertad”,
porque aunque la Iglesia puede estar equivocada, al mandar o prohibir
algo, lo que Dios nunca va permitir es
que lo que prohíba hacer sea un pecado
de omisión, o que lo que mande sea pecado y eso es una garantía.
Ahora bien, y en esto entiendo a
Santa Teresa que busco toda su vida, un confesor inteligente, yo en eso he
tenido más suerte.
Nadie, nadie, ni el Papa, puede
decir a otro que ha pecado, ni grave ni leve, y no puede, porque nadie puede
entrar salvo Dios, en el interior del hombre; puede decirle que tal acción que
hizo es mala, que es pecaminosa, pero no que haya pecado
Y esto porque para pecar, se
requiere plena advertencia y perfecto consentimiento
Y saber, o creer que lo que se
hace esta prohibido por Dios, o por la Iglesia
Y si uno no lo sabe, y se entera
cuando ya el hecho es pasado, pues no hay culpa.
Una anécdota
En los años de la guerra civil,
una joven de familia católica, fue violada por un sinvergüenza, a consecuencia
de lo mismo, la chica quedo embarazada, su abuela que era una mujer creyente,
religiosa, lo primero que dijo, fue “hay que buscar quien le deshaga eso, y
darnos prisa, antes de que tenga alma, que después no podemos que es pecado”.
La buena mujer, se basaba en lo que “el ancora de salvación” decía, al hacer el examen para la confesión
del 5º mandamiento: Si ha procurado aborto, y si fue antes o después de estar
animada la creatura
Dando a entender que era más
grave después de la animación, porque era ya una persona, pero que lógicamente
una esposa no debía hacerlo nunca.
Pero claro esta, en el caso de su
nieta no había una esposa, habia una joven, una niña casi que por un acto
brutal estaba embarazada, entonces era casi una obligación “librarse de
aquello”.
El aborto no se produjo, porque
el padre, de la joven ateo y comunista que tuvo exiliarse en Francia, se opuso y se opuso
porque para él, que no creía en almas, ni en animaciones si su hija estaba
embarazada es porque había un hijo formándose en sus entrañas, y ese hijo
estaba vivo o de lo contrario no iba vivir nunca.
A mi me contó la historia, la
propia bisnieta a la que su abuela “quiso asesinar antes de nacer”, bisabuela a
la que según dijo adoraba.
Pues bien, si ese aborto se
hubiera realizado, esa abuela no hubiese cometido ningún pecado pues estaba
obrando con conciencia errónea, pero si
se habría producido una muerte inocente.
Ahora bien, si una persona antes
de cometer una acción, se entera, o le dicen que esta prohibida por Dios, que
la condena la Iglesia, tiene al menos que poner todos los medios para ver si es
cierto, que esta prohibida, y si esa acción pudiese poner en peligro a alguien
no debe hacerla, si lo hace entonces si tiene culpa
Porque el error de conciencia, no
es decir: “sí pero yo no lo considero pecado” porque eso es ya juzgar la
ley, y como dice el sobrino de San José,
“si juzgas la ley, ya no eres cumplidor de la misma, sino juez y uno sólo es el
Juez”
Si no que es “yo obro así, porque
creo que estoy obrando bien, y según lo que sé estoy obrando bien, pero si me
demuestran que no, cambio”
Por eso es necesario la formación
de la conciencia, también para poder aconsejar y enseñar, y corregir a otros
sin juzgarlos; es lo que aconseja San Pablo, cuando habla de los alimentos
impuros o de las carnes sacrificadas a los ídolos.
Y lo que hay también que tener en
cuenta a la hora de analizar la historia para no condenar a la hoguera, o al
mismísimo infierno, hechos que hoy suenan horribles, porque lo son, pero que
sus autores no tenían nuestra madurez espiritual, y no podemos decidir que
obraran con mala conciencia.
Y aquí voy muy resumido con los tipos de mala
conciencia
La conciencia laxa: Para la
que “ancha es Castilla” todo esta
permitido, hay que gozar de la vida
La conciencia escrupulosa. Que hace ver el pecado donde no lo hay, que
más que el Dios Papá de Jesús presenta un general tipo Pinochet u otro mandón
La conciencia farisaica. Que es
experta en ver los pecados de los otros, los suyos aunque sean igual o mayores,
son virtudes.
Como la de aquella comedia de
Arniches
Señora.- ¿Te has fijado, la
señorita N se casa el jueves
embarazadísima, que horror, qué poca vergüenza,
en estado antes del matrimonio ¿no te parece querido?
Señor, marido de Señora.- No, veo nada del otro jueves, no es la
primera, te recuerdo querida, que tú, también te casaste encinta
Señora (frunciendo el ceño).- Sí,
pero no compares, que yo iba embarazada de un poquitin de nada, y además era de
ti, cariño
Seguro que altere en algo los
diálogos, de los nombres ni me acuerdo, ni del título, porque la vi, en Estudio
abierto, hace siglos