jueves, 23 de marzo de 2017

pornografía y erotismo









Pornografía y erotismo
Entre el erotismo y la pornografía hay una diferencia, aunque muchas veces hay escenas de películas “normales” que son más pornográficas que eróticas.

El erotismo no es malo, es la manifestación del amor humano, del amor esponsal y este es bueno y santo, como ya se sabe viene de Eros (Cupido) dios del amor, erotismo es todo lo referente al amor entre el hombre y la mujer y su expresión física, las novelas románticas pueden ser llamadas novelas eróticas.

Aquí lo que prima es el amor de la pareja, lo que cuentan son sus sentimientos sus almas, aunque ese amor se manifiesta a través de sus cuerpos; por eso en las películas antiguas, en donde si había escenas eróticas se enfocaba el rostro de los protagonistas, porque es ahí en la cara, donde se ve el alma, y donde se veía hasta qué punto estaban enamorados, o incluso hasta qué punto uno de ellos fingía estarlo.

Por el contrario la pornografía es inmoral y degradante, para esta no hay personas, hay objetos de dar placer, la mujer o el hombre no son ya el otro, o la otra dignos de amor y respeto si no que son un medio para dar placer al cuerpo, y sólo al cuerpo, la persona es degradada, incluso a veces se llega al crimen, a los golpes porque no se trata como a un ser humano

Por eso en estos casos se “mata la persona” es decir se la despersonaliza no mostrando su rostro y usándola como medio para excitar los bajos instintos

Es por ello que como cristianos tenemos que estar en contra de la pornografía, y como mujeres aún más si cabe, y en especial con los monstruos degenerados que la usan con niños inocentes

Retomo el erotismo para decir por último que incluso en la Biblia hay erotismo.

El libro del Cantar de los cantares;  y,  muchas escenas del A.T. y hasta en el N.T, ahí está el capítulo VII a los Corintios pero no hay pornografía.

Estamos acostumbrados a pensar que tanto el erotismo como la pornografía sólo pueden darse en imágenes pero no es así.

Una novela o incluso una noticia pueden ser pornográficas si lo que describen tiene por objeto rebajar a la persona a la de objeto para el tipo de placer que sea, sí aunque no muestren ni una sola imagen dejan con sus letras en la mente del lector una idea retorcida de lo que es el ser humano, si al describir una historia de amor lo que prima no es el amor de los protagonistas, sino una parte de este y centrado en él.

 Y por supuesto la pornografía entra también en el terreno de la violencia, en esos falsos, “correos electrónicos” mostrando niños deformes, y que no tiene más objetivo que despertar el morbo; olvidando que todo hombre y toda mujer es imagen de Dios.