Tú Señor nos sostienes y nos libras desde el primer día, hasta el último.
Dios nos sostiene en la existencia, desde el momento en que nos llamá a existir, y nos resucitará, y nos sostiene en la vida sobrenatural desde el primer momento en que le decimos que sí, ya sea indirectamente, en el caso de niños y discapacitados psíquicos, ya sea directamente, y cada vez que después de haberle dicho, “No”, ayudados por él, por su Gracia, le decimos que sí.
Dios nos libra hasta el día en que entremos en el Cielo, de todo lo que nos daña, que a veces, muchas veces son cosas o personas que pensábamos eran buenas para nosotros
Dios no se desentiende un minuto de cada uno, pero lo mismo que al ave o al animalito que alimenta no le lleva la comida a domicilio, pero se la da, a nosotros nos da los medios, pero no, nos lleva a la iglesia de una oreja, ni nos abre la Biblia etc, Dios quiere que como el ave y el animalito colaboremos, y, vayamos a buscar lo que él ha puesto y tiene para nosotros, si el león no sale a cazar no será por falta de gacelas que muera de hambre, si la gacela no sale a pastar no será por falta de pasto que muera de hambre, si yo no tomo La Biblia, si no voy a la iglesia, sí no hago oración, no será culpa de Dios, si muero espiritual y sobrenaturalmente de hambre.