sábado, 2 de marzo de 2024

Dimás el Santo del último mínuto

 

Dimás el santo del último minuto Dimás el Santo del último minuto, con permiso del Padre Pedro Núñez, Dimas es un criminal, seguramente un guerrillero o terrorista; una escoria humana, que acaba por méritos propios en una cruz. Él mismo lo reconoce, está allí justamente
Dimás no es bueno, no es un simple ladrón es un criminal, se ha debido cargar La Ley mosaica enterita, o la natural sí es un esclavo rebelde pero gentil
Dimás no hace propósitos de cambiar de vida, imposible le quedan pocas horas, o días ni de reparar el daño hecho, imposible,  sí se consultase su caso en las redes sociales de entonces, sí las hubiera habido. Todos lo habríamos mandado al Infierno
Sin embargo Dimás entra en La Gloria de la mano del Hijo de Dios, al que Dimás el suertudo, tiene la suerte de tener de compañero de ignominia y patíbulo
Dimás defiende la inocencia de Jesús, ante su compañero Gestas, lo hace sin esperar nada, qué iba esperar de otro en su misma situación. 
Dimás es valiente y con la espada de la verdad, llama injustos y asesinos a los que han llevado a Jesús a La Cruz.
“Nosotros, recibimos el pago de lo que hemos hecho, pero éste no hizo ningún mal”
Al decir que Jesús no hizo ningún mal, no solo está proclamando su inocencia la de Jesús, si no confesando que son injustos y asesinos, los que lo llevaron ahí
Dimás aunque no lo sabe se ha convertido en Profeta de Yhv
Por eso el Padre habla por él, sí no qué iba saber Dimás de lo que pudiera haber hecho Jesús
Y, por eso el Espíritu del Padre lo ilumina, le revela quien es Jesús, y Dimás hace una petición insólita a un crucificado que pronto va expirar
“Jesús acuérdate de mí, cuando vengas en tu Reino” algunos  traducen cuándo estés.  Da lo mismo.
Dimás esta confesando ya El Levantamiento y Glorificación de Jesús
Y eso no podía saberlo sin el Espíritu Santo
Y, Jesús le responde en verdad te digo. Hoy estarás conmigo en el Paraíso.
Y Jesús el Verbo que se hizo carne en La Virgen María, aquel día, le dijo a su Papá adorado. “Papi este es uno de los hijos que tenías perdido, lo he lavado con mi Sangre, Dimás esté es Papi Nuestro Dios adorado”
Así Dimás da el golpe perfecto, se convierte en el santo del ultimísimo minuto.
Porque como dijo el inca
“Nunca jamás y en cualquier parte, para volver a Dios jamás es tarde, y así el pecador no se acobarde, pues tiene un Dios tan bueno, cuyo oficio, es olvidar la ofensa y no el servicio”
Dimás ruega por nosotros