jueves, 7 de marzo de 2024

Compartir



Compartir con los hermanos en la fe, y, los otros mi conocimiento de Jesús; y, los carismas que me dio; compartir y aceptar lo que comparten conmigo.

Y, esto sabiendo que los dones y los carismas que cada uno tiene, no son para su uso y disfrute, sino para poner al servicio de todos, y unos tenemos unos, y otros otro.

Negarlos no es humildad es soberbia, y es falta de gratitud hacia Dios que nos los ha dado

Pero lo que no puede uno tampoco es tomar los que no tiene, y por ejemplo sí eres tímido, ponerte a dar charlas, o darlas sin tener la formación y la preparación debidas

A veces los carismas pueden ser cosas tan simples como saber contar chistes, y hasta inventarlos, cosa que viene muy bien, para levantar ánimos

O saber tratar a las personas, no preguntar lo que no se debe, saber guardar secretos, sin que te lo tengan que pedir

Hacer dulces, organizar cosas

Otros tendrán el carisma en tener dinero, dinero ganado justamente no vale robar, esos bienes son el carisma que tienen que compartir

Y, los demás tenemos que dejar que compartan con nosotros, incluso los que tienen el mismo carisma, porque lo que nos llega del otro, es un don, acogerlo y agradecerlo y no me refiero a la persona, o personas, a veces sí, otras no será posible, pero si a Dios

Y saber pedir ayuda, preguntar cuando no sabemos, pedir no ir de autosuficientes, que ni Cristo lo fue en su vida terrena, y no tuvo reparo en pedir a Pedro le dejase la barca. No olvidemos que es el Dueño de todo, pudo sentarse en el mar, bueno en el lago

Compartir sin esperar nada, y pedir se nos comparta esperando un “No”

Que al fin y al cabo todo es de Dios, y nosotros solo somos los peques de la familia,, de la familia de Dios