A veces el fruto viene en la vejez. La Biblia nos habla del guerrero de 80 años que da gracias a Dios, por tener la fuerza del búfalo. Envejecen y se cansan los jóvenes, yo apoyado en TI, Señor escalo montañas.
Nos cuenta de mujeres estériles y mayores que conciben, que dan a luz
Con esto Dios nos está diciendo una cosa muy importante, no que las mujeres mayores vayan a ser madres físicas, ni que los bisabuelos se hagan alpinistas
Sino, que lo que tenemos que hacer es confiar en Dios, pensando en nosotros y en los demás, dejarnos penetrar invadir por su Espíritu Santo, dejar que nos contagie su Juventud eterna
Y, cuando él quiera daremos fruto, darán fruto
Es posible que aquí veamos el fruto pero no la planta que lo produjo, eso se nos mostrará al llegar a Casa, otras sí lo vemos es más posible se nos muestre el de otros no el propio
Pero Dios puede hacer sí no se le impide, que una persona egoísta de pronto sea generosa, porque no está hablando de que a uno le empiecen a ir bien los negocios. Porque eso a Dios le importa un bledo
Y es posible que aunque viejas, demos a luz, en un parto virginal, como María.
A quién pues al Verbo de Dios, que el Espíritu Santo, la Ruha divina habrá traído a nuestra alma, y allí se habrá gestado, y como María lo pariremos al mundo, aunque el mundo lo rechace, solo faltaran los pañales, pues tampoco, porque esos pañales son nuestra vida, en la que se engloba la oración, el vivir de cada día
Sí, no tenemos que desesperar de nadie, ni de nosotros mismos, aunque a veces cuesta.
Con Dios daremos fruto en la vejez, y sí escalaremos de la Mano de Jesús no el Everest el mismo Cielo