martes, 12 de marzo de 2024

Como una madre gestante

 

Como una madre gestante, se prepara asume el dolor del parto.

La madre gestante, se prepara y asume el dolor del parto, sabe que cuando llegué el momento, habrá de pasar por él que dicen es el mayor dolor físico. De la misma intensidad que el de un crucificado con clavos

La mamá lo sabe, y lo asume ese dolor es preciso para que su criatura, sea dada a la luz, sacada al exterior

Eso no impide a las mamás serlo, toda mujer haya parido antes o no, sabe que el parto es doloroso

Podría tal vez una primeriza pensar que no sería para tanto, pero es que las madres de familias numerosas, incluso madres que han estado a punto de perder su vida, que han sufrido lo indecible, han seguido pariendo, dando vida al mundo

Cuando una mujer se queda encinta, sabe ya, que tendrá que sufrir, y eso no la apena.

Cuando llega el momento, que dice Jesús se angustia, pero todo pasa al ver al bebé

Y, salvo excepciones las madres no recuerdan sus dolores, incluso si cuentan la dificultad de su parto

Naturalmente preferían que el parto fuese indoloro, pero como es imposible no las arredra

Y que los hijos al salir de su cuerpo las hiciera sufrir no hace que no los amén, al revés

A Jesús le pasa lo mismo. Jesús asumé en su humanidad desde que tiene uso de razón.

Qué ha venido a devolvernos al Padre, según avanza su vida, sabe que sí no traiciona la misión que le da el Padre, van acabar con su vida, y va ser en una cruz, pues los judíos no podían matar a nadie. Sabe que gracias a su muerte en La Cruz, volveremos al Padre

Y, no le asusta, sí al final un poco, pero cuando ve su cortejo él que le acompaña en La Gloria, él que lavó en su sangre su túnica, se olvida de esos dolores

Jesús decía Juliana de Norwich, es nuestra madre. No andaba muy desencaminada la mística inglesa