Jesús se revela en la cruz, jn 8, 21
Jesús en La Cruz se manifiesta como es en su doble naturaleza en su Persona divina.
Es el hombre que sufre inocentemente, sin entender porque Dios no interviene, y sabiendo al mismo tiempo porqué no interviene. Es el mismo Dios sufriendo en su humanidad asumida, y sufriendo realmente no solo en la carne, en la debilidad, sufriendo porque sabe conoce que habrá quien se niega a aceptar su Donación su Sacrificio.
Jesús muestra su Poder de Salvar anunciando el Cielo abierto a su compañero de infortunio Dimás, su Poder que no se doblega al hombre, su Santidad doble como Dios y hombre, él único hombre Santo, los demás lo son por Él
Por eso no baja, ni se tira de La Cruz, no lo hace ni para mostrar su poder, él poder que tiene que mostrarse ya no lo es, pues está obedeciendo, sometiéndose al que pide se muestre, ni para ahorrarse el tormento.
Juan además nos lo presenta muriendo cuando quiere, dice
“Padre en tus manos pongo mi espíritu” inclina la cabeza y muere, entonces no al cabo de un rato.
Es Señor de la Vida, y da su vida cuando quiere.
Mi salvación es creer y aceptar que Jesús es Yhv y me salva por su Cruz, Jn 8, 21
Para salvarme yo tengo que creer y aceptar desde las tripas, que Jesús es mi único Salvador, no mis obras que solo valen hechas en él y con él; no lo que llamé mi cruz, su Cruz, y esa Cruz es no solo la que estuvo en el Calvario, es también aquella en la que Jesús está crucificado en sus hermanos, es por tanto acercarme, compartir y aliviar en lo que pueda a los crucificados de hoy, es aceptar que sin estar en La Cruz con Jesús no hay salvación, es por ello huir de un cristianismo fácil.
Que la cruz no es que me duela la espalda, la cruz es tener miedo a serle infiel porque la situación no es fácil, es...
Reflexión bíblica mes de la Biblia septiembre 2023