Aquí esta la esclava del Señor, hágase en mi La Palabra, ( o según tu Palabra)
La verdad es que le cuadran bien las dos expresiones.
Ya que en María se realiza la Palabra de Dios que le trae Gabriel, y al mismo tiempo, en ella la Palabra o Verbo de Dios se humaniza
En los dos casos, prima la disponibilidad de María que sin falsa humildad, sin excusas, se pone a total disposición del Dios de Israel, se entrega a él como una corderilla, le deja hacer.
Ella no pone obstáculos no habla de su juventud, de que no es digna, de que...
Ella simplemente adora, bajando la frente, y dejando que Dios encarne en Ella a su Unigénito que es también su Ungido.