viernes, 19 de abril de 2019

Quien rechaza a Dios rechaza la vida.








Quien rechaza a Dios rechaza la vida.

La persona que rechaza a Dios, y, no me refiero al ateo, ni al agnóstico porque muchas veces estas personas, lo que  rechazan es un falso concepto de Dios, es decir rechazan un dios que les han transmitido y, hacen bien porque ese dios es falso

Sino a la persona que rechaza a Dios, al Dios de Jesús

Y, quien lo rechaza
Quien rechaza a su Iglesia una vez conocida
Quien confunde a Dios con la parte humana de la Iglesia
Quien piensa que Dios es su criado
Quien rechaza La Palabra de Dios, porque limita el poder de Dios, Dios puede hacer lo que el cerebro de mosquito, de quien lo rechaza le permite

El que vive en contra de su Ley, haciéndose él mismo su propia ley

Él que se cree con derecho a cambiar La Ley natural

El que manipula la Palabra de Dios

Él que va a Dios cuando le conviene haciendo de Dios un ídolo

Cada vez que pecamos gravemente, rechazamos a Dios, pero sin embargo si el pecado no fue contra la fe, ni la esperanza, aun suele quedar una aceptación de Dios, esa aceptación, es el saber que hemos obrado mal, de ahí por gracia nacerá el arrepentimiento

El problema está en cuando pensamos que es Dios quien debería cambiar, o su Iglesia porque Dios nos da la razón, es lo que torpemente por ejemplo piensas las católicas pro choice

La solución está en no dialogar con la tentación, pero si caemos no dialogar con el pecado, nos acabaremos convenciendo de que salvo nosotros Dios, La Iglesia, La Biblia están errados.

Y, con ello rechazaremos al verdadero Dios, para hacernos nuestro becerro de bolsillo, pero como sólo el Dios viviente da la Vida, habremos rechazado la vida, la Vida que no acaba, nos quedaremos con la vida animal, peor aún si no rectificamos ayudados por la Gracia con la vida infernal, pero como es incompatible vida e infierno, con la muerte eterna.