sábado, 13 de abril de 2019

Agar. Leyendo la biblia de otra forma


 Agar. Leyendo la biblia de otra forma

Son muchas las formas de abordar La Sagrada Escritura, hoy quiero hacerlo, partiendo de otra forma de ver, el personaje de Agar, una mujer que pasa casi oculta por las fuertes personalidades de sus amos, Abram, y Sarai

Agar es esclava de Abram, una esclava egipcia que acompañara al patriarca y su esposa, desde que salen de Ur, según dice el libro del Génesis en su capítulo 12

No se vuelve a nombrar hasta que Sarai, tiene la idea de usarla como madre de alquiler, Abram desea ser padre, Dios le ha prometido que será padre de pueblos, pero para ello hacen falta hijos que no llegan. Hay una solución, que deje embarazada a la esclava,  esta parirá sobre las rodillas de Sarai, y, así será como si el hijo fuera de Sarai, de Abram, ya lo es,  y, Abram se acostó con Agar, nada importaron los sentimientos de Agar, ni Sarai, ni Abram parecen muy conscientes de que están abusando, de otra persona, de una mujer, que gestará y parirá un hijo que no será suyo, como tantas madres de alquiler hoy en día

Agar se ve encinta, y, piensa que ya es señora, se olvida que el hijo nunca será suyo, que sólo es una esclava, y, en su error se permite envalentonarse con su ama, que la castiga, y, ella escapa. Pero Dios tiene otros planes, y, la manda regresar, y, le anuncia que dará a luz un hijo, que será grande, él contra todos, todos contra él. Para Dios el hijo que parirá Agar es hijo de Agar

Y, nace el pequeño, al que llaman Ismael, todo va bien, a los 14 años, Abram lo circuncida y se circuncida él, después vienen 3 extranjeros, a los que el patriarca trata como si fuera uno sólo, y, uno de estos, anuncia a Sarai, en quien ya han cesado definitivamente las reglas, que será madre, Sarai, se rie, y, Agar en su tienda también, pero el extranjero le recuerda a Sarai, que Dios no conoce la palabra imposible

Y,  nace Isaac, el hijo de Abraham y, Sara, Ismael no trata bien a su hermanito, y, un día, Sara manda a Abraham que eche fuera a la esclava y, a su hijo, no puede heredar con el suyo. De repente ya no es hijo suyo, ahora es el de la esclava, Abraham orientado por Dios que cuidará de Ismael, los despide

Y, Agar se ve sola con su hijo, con un niño no importa la edad que aparece en La Biblia, son números simbólicos, se ve sola, sin nadie, en el desierto, es decir desamparada frente al mundo no tiene a nadie que le ayude, de pronto, siente que su hijo su niño va morir, y, se aleja para no verlo, se queja a Dios no pide, sólo le cuenta porque se aleja de su hijo, “Señor no quiero ver morir a mi niño”: y, Dios le muestra una fuente, una fuente que salvara a su hijo, y, a ella misma, el texto sagrado dirá que se la señaló el Ángel de YHV, forma bíblica de referirse al mismo Dios, da igual con hecho extraordinario, o, sin él, Dios la hizo encontrar la fuente, Dios no la había desamparado, para Él no era una esclava, era su hija, Agar ha experimentado que aunque todos te dejen, Dios no te deja, lo que un día recogería en un Salmo un descendiente del hermano mayor de su hijo de Isaac, “Aunque mi padre, y, mi madre me abandonen, Yhv no me dejará”
Cuando todo parece hundido, Dios nos muestra una fuente

Se revela aquí también la parte “femenina de Dios”, al darle el agua, misión que era propia de las mujeres