jueves, 4 de abril de 2019

Leyendo la Biblia otra lectura de Tobías


Leyendo la Biblia otra lectura de Tobías

Hace un tiempo, hice un pequeño trabajo sobre Tobías  padre, y, Tobías hijo, ahora pretendo hacer una nueva inmersión, no anulando lo que escribí las otras veces, sino desde otro ángulo

Tobías, o Tobit, aparece en el libro que lleva su nombre en el AT. Lo encontramos como un judío que vive en Nínive, a donde fue llevado cautivo con el resto de su pueblo, el cautiverio fue un castigo o mejor dicho una consecuencia de vivir alejados de Yhv, y, enredados con los dioses de otros pueblos, y, los que ellos mismos se habían fabricado.  Pero el caso es que ni Tobías, ni los suyos los más próximos  habían cometido aquel pecado, sin embargo allí estaban esclavos de los ninivitas

Dios en su infinita justicia no intervino, como no intervendrá tampoco para sacar a Jesús de La Cruz. Dios deja que el inocente, el justo,  aunque Tobías no es justo de todo, es pecador, no es Jesús, pero Dios permite que el justo sufra con el culpable, para probar al justo, para que el justo que salvo Jesús no lo es al cien por cien, ni al cincuenta, sufra el castigo  por los pecados ocultos, para que siga ejerciendo  la justicia y, sea una luz para el injusto a quien su injusticia ciega, y, al vivir en tierra injusta podría cegarse espiritualmente de todo,  por cualquier motivo puede hacerlo, Dios no tiene que dar explicaciones

Lo que si está claro es que nuestro Dios no es un dios de soluciones fáciles, de a ti te libero, si a veces puede hacerlo pero siempre en pueblo, por eso me dan risa y pena, esas cadenas de oración en internet, que pretenden doblegar la voluntad divina

Tobías ya en el país ninivita, se dedica a ser lo que fue siempre un buen judío, y, desobedece las ordenes injustas del rey ninivita, enterrando los muertos, como había desobedecido las órdenes del rey de Israel no adorando los becerritos, Tobías sabe que él  hacerlo, el enterrar los muertos le puede acarrear la muerte, pero no le importa, su fe es mayor

Si uno quiere vivir como Dios quiere con su ayuda puede hacerlo en el sitio más impío si no quiere ni el lugar más santo de la tierra le valdrá´

En contra de lo que se podría pensar unas golondrinas animal impuro para los judíos, le ciegan los ojos con sus excrementos calientes,  el decir que Dios lo permitió, es pasarse 3 telediarios, las golondrinas para ir “al wáter no piden permiso”,   pero Dios pudo intervenir de algún modo, pero no lo hace no es dios de milagrito de bolsillo, y, Tobías queda ciego, el hombre bueno queda sin vista

Lo asume con paciencia, hay también aquí una enseñanza al estar en sitios impíos, o no muy buenos se puede oscurecer la visión del alma, uno deja  de ver claro

Tobías pasará más pruebas, su esposa Ana, será agraciada por los señores a los que sirve con un cabrito, el pensará que fue robado, pero su mujer le hará ver que es una recompensa por sus buenas obras, Dios nos premia y castiga por medio de otros seres o personas, en este caso fue una  recompensa

Tobías tiene un hijo de su mismo nombre, al que da una serie de excelentes consejos paternales, y, le encarga ir cobrar un dinero  a casa de un pariente, dinero que les debe, para ello deberá procurarse un buen compañero de viaje, el joven  encontrara a un casi pariente, que en realidad es el Arcángel Rafael, quien lo acompañará en su viaje, pero la historia de Tobías hijo es otra, y, ahora estoy con Tobías padre

Al final Tobías recuperará la vista, por la acción del Arcángel, Dios a quien se quedó ciego, entro en noche oscura, o cree haber perdido la fe, porque ayudo a otros, no lo deja ciego, le devuelve la vista, le devuelve la fe. Sabrá que su hijo estuvo acompañado de un príncipe celestial de un Arcángel, y, recibirá una hija su nuera

Porque Dios nunca abandona a los suyos
Y, suyos somos todos