viernes, 19 de abril de 2019

Hay que luchar contra el Mal es mandato divino. Somete en la batalla a tus enemigos






Hay que luchar contra el Mal es mandato divino. Somete en la batalla a tus enemigos

El Salmo 110, dice dirigiéndose en primer lugar al rey David, pero exactamente al Mesías, es decir a Cristo, pues ambas palabras significan lo mismo, Ungido

Jesús recibe un mandato de su Padre, de someter a sus enemigos, estos enemigos son el Diablo, y, sus hijos que son La muerte  y el pecado

Jesús los venció con su muerte en Cruz y su Resurrección, pero a los hijos menores los dejo heridos, porque quiere que nosotros continuemos su obra, es lo que dice Pablo de completar la Pasión de Cristo, que es una forma de hablar. Porque a la Pasión de Jesús no le falta nada

Pero nosotros tenemos que continuar la lucha contra el Mal, en primer lugar y al mismo tiempo en nosotros mismos

Al mismo tiempo en la Sociedad y en la misma Iglesia
 Cómo pues cada uno en su lugar, y, como pueda, siempre en unión con Jesús, unión por la Gracia, no por ser de cofradías

En la sociedad con la denuncia y con el voto responsable, y, a veces lo más responsable es no votar, una conciencia bien formada dirá lo que es mejor

Ponernos del lado del pobre, del exiliado, del delincuente que quiere reintegrarse en la sociedad, para ser una persona de bien, defender la vida empezando por la humana que está más débil y en peligro, no nacidos enfermos, viejos,  lucha contra el aborto criminal, la eutanasia, y, por supuesto  torturas pena de muerte

La justicia  salarios y pensiones justas, atención a los pobres y enfermos, a los que no tienen casa, acogida sensata y prudente de exiliados  y, un largo etc.

En La Iglesia obedeciendo y unidos a Pedro al Papa, no al obispo X, por muy majo que sea, y, menos al cura o al teólogo unidos al Papa sin necesidad de que sea dogma de fe

No poniendo a los curas en un pedestal, porque  son criados, de Cristo, y, están al servicio de sus hermanos

Denunciando si vemos cosas contra la moral, más que contra la liturgia son más graves

Orar por ellos

Respecto a nosotros  examinar nuestra conciencia, acudir al Sacramento de la penitencia donde el sacerdote ya no es el mero cura, sino que está en lugar de Cristo

Y, esta lucha contra el Mal, en unión con Jesús, teniendo a María al lado, llevándolo a la oración la hacemos en una batalla

Una batalla en la que el campo solemos ser nosotros mismos, que nos ponemos disculpas

Si es respecto al mal en uno mismo

Con un, “no fue para tanto”, “hay gente que hace cosas peores”

Si es respecto a la sociedad, la Iglesia en su parte humana

“quien me manda a mí, meterme en berenjenales”

“si eso no vale para nada”

“que voy a perder amigos”

Y, también claro los ataques o avisos desde fuera, pero nosotros tranquilos, Jesús esta de nuestro lado, y, lucha con nosotros

Resultaremos heridos, pero hay Hospital de campaña, la oración, y, en ese Hospital hay UVI, La Confesión

Luchemos pues contra el Mal, nos lo manda Dios