Caída de la humanidad, y, comienzo de la Salvación
Dios crea la humanidad, Adán y
Eva, hombre y mujer, primera pareja, crea un ser comunicativo, un ser capaz de
dar la vida, junto con Él, no crea un ser unitario, pues aunque cada ser humano es único, está llamado a la
comunicación con el otro; o no sería imagen de Dios
De esta pareja, ha de nacer con
el tiempo, Cristo, el Mesías, por ahora ellos serán sus lugartenientes, se les
concede el dominio de lo creado, y, se hace con un precepto
El árbol prohibido
Dios entrega al hombre todo lo
creado, sólo una cosa le prohíbe el acceso al árbol de la ciencia del bien y
del mal, como prueba de fidelidad, y, porque según los planes de Dios, no es el
momento
Pecado de soberbia no de lujuria, primera idolatría
Y, entonces el tentador la
serpiente infernal, sugiere a Adan y Eva, a la humanidad, que si comen del
fruto prohibido, serán como Dios, conocedores del bien, y, el mal dueños de su
destino, serán dioses. Es la primera tentación a la humanidad, satán la
repetirá más veces visto su éxito
De pronto, la luz se vuelve
tinieblas, se avergüenzan de su cuerpo, se sienten culpables y se esconden de
Dios
Promesa de salvación
Viéndose desnudo, desprovisto de
la gracia, el hombre se esconde se disculpa en la mujer, está en la serpiente;
quiere huir pretendían ser grandes, y, se han hecho menos que las bestias. Lo
han perdido todo. Pero en medio del miedo de caos, suena la Voz Paterno materno
de Dios
Ahí donde ha tenido lugar el
pecado, empieza ya la historia de la salvación
“Yo pongo enemistad perpetua,
entre tú y, La Mujer, entre su linaje, y, el tuyo, este (el linaje de La
Mujer), te aplastará la cabeza, cuanto tú le ataques el talón”
María, La mujer en perpetua
enemistad
Jesús, su linaje
Nosotros el talón de Cristo
La serpiente infernal ya se
retuerce de rabia
Empieza el primer capítulo de la
salvación