No hay vida cristiana sin conversión continua
El cristiano esta en conversión continua, conversión que no es sólo arrepentirse, y, es más puede haber arrepentimiento sin conversión
Convertirse es avanzar hacia Dios, dejarse alcanzar por él, como Dios, es siempre el enteramente, "otro", en esta vida, no se va realizar, porque si en algún momento, pensamos que ya tenemos a Dios en plenitud, hemos de volver al principio, se nos colo un ídolo
Uno puede arrepentirse de haber hecho algo malo, por las consecuencias que tuvo para él, pero eso aunque no sea malo no es conversión, la conversión implica a Dios
Así pues serían estos los pasos, en los que además quien hace todo es Dios
Del horror al pecado grave por el Infierno, al horror al pecado grave por lo que Jesús sufrió, por el Amor que Dios nos tiene
Del horror al pecado leve, aunque no podemos evitar caer por miedo al Purgatorio, al horror al pecado leve, por lo bueno y lo que nos ama Dios
De querer amarlo siempre, a desear que todos lo amen
De desear que todos lo amen, a procurarlo amando nosotros por él a los demás
De amar po él a los demás a buscarlo en todo, y, en todos, y, como debido a nuestra condición de pecadores, vamos a retroceder, la conversión tiene que ser continua, y además como en esta vida, nunca tendremos a Dios en plenitud. Hemos de convertirnos cada instante, pero lo hará él en nosotros, nosotros solo hemos decir, Si