jueves, 28 de febrero de 2019

Aprovechar los momentos de Luz que Dios concede.






Aprovechar los momentos de Luz que Dios concede.

No es que tengamos que estar pendiente de ellos, o que centremos nuestra vida en los mismos, pero cuando Dios nos los da, debemos aprovecharlos, porque suelen durar muy poco

Es ese momento en que sin saber porque, sin haberlo planeado ni pensado, sientes ganas de entrar un momento en una iglesia, de pararte a orar frente al mar, la montaña, el río, sin palabras, o con palabras

De adorar a Dios acariciando un niño, un perrito, un gato, un cordero, etc

De quedarte en silencio, oyendo su Voz callada en tu interior

De escribir para comunicar su Amor

De llamar aquel amigo, conocido

De pedir perdón

De dar perdón

De tomar La Biblia abrirla, y, “escuchar su Voz”

Cuando estando en una iglesia en una novena, rosario, excepto La Misa, sientes deseos de arrodillarte, y, hablar solo con Él

Y, también cuando de pronto, notas que debes de hacer aquello, estudiar Biblia, teología, meterte en un grupo de ecumenismo.

Cosas que no habías pensando, pero que Él te esta diciendo quiere que hagas

Si no se aprovechan puede que no vuelvan, o puede que sí, pero si no vuelven uno se habrá perdido mucho

Por eso debemos aprovecharlos

No tener una fe ritual, estancada, de bolsillo, una fe farisea, si no abierta al Espíritu, que como vendaval, y Fuego llega e incendia