El Espíritu Santo, trajo a Jesús,
será él quien de nuevo haga la venida
definitiva
Cuando el Verbo, se encarno fue
el Espíritu Santo, quien preparo el alma, y el cuerpo de María de Nazareth, su
alma, dándole todas las gracias,
preservándola por redención anticipada de la culpa de origen, el cuerpo
haciéndola sana fuerte
Fue Él, sin excluir al mismo
Verbo ni al Padre, quién hizo que no fuera preciso el germen paterno humano,
sin que resultase un clon
Jesús fue concebido por la acción
milagrosa del Espíritu Santo
Cuando Jesús nacido, y joven
adulto, emprendió su vida pública, lo hizo impulsado por el Espíritu Santo
Cuando resucito, lo resucito El
Espíritu Santo
Cuando su Cuerpo místico La
Iglesia empezó a respirar en Pentecostés la puso en marcha el Espíritu Santo
San Pablo nos recuerda que no podemos confesar a Jesús, como Señor con
todo lo que eso implica, sin el Espíritu Santo
Y, será Él, quien traerá de nuevo
de modo definitivo a Jesús, al corazón de todos los seres humanos al fin de los
tiempos