sábado, 4 de abril de 2020

Dios siempre viene

 Siempre viene y actuad en el momento, su momento no el mío

Dios siempre viene en nuestra ayuda, siempre actúa pero en su momento, no en el nuestro, siempre nos da lo que le pedimos salvo que vaya en contra de nuestro bien, pero a su estilo, cuando él quiere

Dios no se pliega  a nuestros caprichos, por eso las cadenas de oración son absurdas, pues no se ponen a su disposición, sino que tratan de echarle un pulso, como si los rezadores, supieran más

Una persona ora pidiendo a Dios, lo libre de una tentación persistente, o de volver a caer en una falta concreta, por regla general no hay intervención extraordinaria, pero Dios pondrá ante esa persona medios que lo alejaran de esa tentación, o medios y gracia que le facilitaran no caer en esa falta, porque Dios nunca le va quitar la libertad a nadie

Puede ser un libro, un programa de radio, tv, o hasta una persona amigo, o no, que le pide un favor, y, por hacérselo no puede hacer lo que iba hacer, en su libro "Dios existe, yo lo encontré", André Frossard, cuenta como siendo todavía ateo, yendo hacia un prostíbulo, un mendigo le pidió limosna, le dio el dinero que llevaba, y, ya no pudo ir, una vez convertido, se dio cuenta, que aquel mendigo, había estaba allí por Dios, que Dios se había servido del, para que no pecase.

Y, Giovanni Pappini, en su autobiografía, cuenta que también siendo ateo, yendo con unos amiguetes, se encontraron un mendigo tiritando de frío, y, le ofrecieron una moneda de alto valor, si decía una blasfemia, el mendigo que con aquella moneda, hubiesen podido dormir caliente, y, comer caliente, los miro con pena, y, dijo, "pobres señores, no saben lo que dicen, Dios perdónalos, pobres señores, pretender que yo blasfeme, por una moneda, pobre.."

Y, cuenta que en toda la noche no pudo sacarse de la cabeza, las palabras del mendigo, que fueron el inicio de su conversión

Ante una enfermedad grave, Dios puede permitir que la ciencia cure al enfermo, o, puede curarlo Él en el Cielo, no hay enfermos en el Cielo, Dios sabe cuando ponemos a un enfermo en sus manos, lo que es mejor para él, aunque a todos parezca una tragedia, él sabe si le conviene partir o quedarse, y, así lo dispuso desde la eternidad. Cuando en el Cielo, repasemos con Él el albúm de fotos de lo que pudo ser y no fue, veremos todo el mal, que nos hubiese sucedido, si Dios nos hubiese concedido exactamente lo que le pedíamos, y, que la persona que esta a nuestro lado en el Cielo, y, nosotros mismos estaría, estaríamos en el Infierno.

Por eso hemos de orar y de pedir, pero por Cristo, y, sabiendo que Dios esta con nosotros, y, actúa siempre a favor nuestro, pero a su estilo, cuando quiere, y, como quiere.