No hay paz sin
justicia
Recuerdo, que
una vez era el 25 aniversario del final de La Contienda incivil española
Le pregunte a
“la madrina Obdulia”; ¿Qué quiere decir 25 años de paz”
Me respondió
con su sabiduría, “que no hay guerra”
Sí, eso
significaba, que no había guerra, y, era mucho, ella como tantos españoles la
había sufrido, yo había nacido “en la paz
Pero no era
cierto, yo había nacido en la ausencia de guerra, guerra a la que se temía,
recuerdo como los mayores decían, “cuando muera Franco, dicen que habrá una
guerra, seguido de Dios lo guarde muchos años”
Es lo propio de
las dictaduras, “tras de mi el diluvio”
Pero aunque lo
parezca yo no voy hablar de Franco, de meterme lo haría con los tiranos de
ahora
Sino hablar,
escribir mejor de la Paz, porque La Paz como dice el PP Francisco, como dice La
Biblia es fruto de la justicia, de La Justicia con mayúscula
Lo otro es
ausencia de guerra, cuando se respetan los derechos de todos, los de verdad, no
los que uno se invente, cuando se
escucha al que se queja, al que critica y se atienden sus ruegos si se
puede, y, si no se dan razones, entonces La Paz es real, porque hay justicia,
de lo contrario, será “la paz de la bota”, la paz de la injusticia, que
lógicamente de paz sólo el nombre
Si, a una
persona la siento en una silla, la amarro, y la amordazo, no podrá discutir
conmigo, pero eso no indicará que estamos en paz, sino al contrario
