miércoles, 25 de octubre de 2017

Mujeres de la Biblia Gomer





Mujeres de la Biblia Gomer
Libro de Oseas
Posiblemente no sea una personaje histórico, pero es real, del mismo modo que “El hijo pródigo”; no es  histórico es real
Esta mujer es Israel, Judá, El Pueblo elegido por Dios entre todos los pueblos de la tierra, pero El Pueblo que como esposa adultera, se va una y otra vez con sus amantes
Es la humanidad que abandona a Dios por los ídolos, los gentiles
Es La Iglesia, si La Iglesia, “La Prostituta Santa”, que le llama San Agustín, adultera tantas veces
Es cada uno de nosotros, “esposas infieles de Dios”
El profeta Oseas, nos cuenta “su historia”, su parábola, casi mejor, Dios le manda le aconseje que se case con una mujer que se dedica a la prostitución, que le pida que le sea fiel
Pero la mujer, Gomer, va estar un tiempo con Oseas, y, pronto volverá a sus amantes, concibiendo hijos suyos, hijos de prostitución, que Oseas tomará como suyos, y, volverá a irse
¿Qué hará el esposo?, lo normal sería la lapidación, al menos el repudio, nada de eso, está enamorado, la limpiará la purificará, la llevará al desierto, es decir, donde estén los dos a solas, la acariciará, le hablará al corazón volverán a ser uno, la volverá enjoyar, sus hijos, los hijos de su adulterio ya no lo serán, serán hijos de su Esposo, ella olvidará los amantes, no pronunciara su nombre, ahora solo pronunciará el nombre del esposo. El esposo sabe que al final Él triunfara
Israel, Judá, La humanidad gentil, La Iglesia, cada uno, nos hemos ido tras los ídolos, el adulterio es símbolo de la idolatría, dejamos a Dios, al Dios que nos creó, que nos ama, hasta la locura, para ir en busca de dioses falsos que cada uno se fábrica, o coge ya fabricados, y, Dios como esposo amante, vuelve a buscar a la Gomer infiel, la lleva al Desierto de la soledad, del arrepentimiento, y, de nuevo la enjoya, la cubre con su gracia, se podría hacer un estudio para cada uno de los casos, Israel, Judá, etc. pero basta pensar cada uno en si mismo, cada pecado es un adulterio, porque cada pecado es preferir la criatura al Creador, y, es idolatría, aunque no lo sea de forma explicita
Por eso. La Comunidad Joánica, la del discípulo amado, la de Juan, nos dice en la “historia – parábola” de la samaritana, los samaritanos eran el viejo Israel, no Judá, “tienes razón no tienes marido, porque has tenido cinco, y, él que ahora tienes no es tu marido”
Sin entrar en historicidades, Samaria, Israel, representado en la samaritana, no tiene marido, porque su marido, al que abandonó, y, que ahora viene a buscarla en la Persona humano divina de Jesús,  es Yhv; no los dioses a los que ella ha dado culto, los cinco ídolos que tuvo por sus dioses, pero tampoco lo es, aunque ahora se crea monoteísta, el concepto de dios que se ha formado, el dios manipulable, o como diría Dolores Alexaindre, “el dios plegable de bolsillo”
Su Marido su Esposo, es El Dios que no cabe en templos, aunque le podamos orar en el templo, pero que si cabe en el corazón de un niño, el Dios Amor que sigue buscando, a la Esposa adultera, al hijo rebelde, una y otra vez
Y, los que hemos sido buscados una y otra vez, sabemos que es verdad
Y, si alguien, él que sea nos habla de un dios que va castigar al pecador hasta destruirlo, que busca destruir la tierra, que se cansó de perdonar, mandarlo a paseo, ese no es Dios, si acaso “el otro”, la mona de Dios disfrazado de dios, como es imbécil se disfraza, pero Dios no, nunca él es Esposo enamorado, Padre loco por sus hijos
Gomer puede estar tranquila, si muere sola sin esposo, si la lapidan serán sus amantes, y, será culpa suya. Porque su Esposo Yhv al que representa en la parábola Oseas, siempre estará esperando. Siempre la estará buscando, enamorado como el primer día, porque, para Él no existe el pasado