lunes, 23 de octubre de 2017

Jeremías



Hombres de la Biblia. Jeremías

Profeta, de familia sacerdotal,  es decir de familia acomodada en su época, recibe su vocación muy joven, y, se revela
No tiene ganas de meterse en líos

Sus anuncios en un principio no se cumplen, habla de tragedias si se rebelan contra los reyes extranjeros, anuncia que el rey ira cautivo, y, eso basta para que lo ven como un enemigo, o un loco
Intentan matarlo varias veces, sin conseguirlo, él mismo duda en ocasiones de su palabra, desea no haber nacido

Los reyes se suceden ante  sus ojos; y, por ejemplo el Rey Joaquín es un rey que pasa de sus oráculos, no dudara en rasgar el papiro que le manda Jeremías y arrojarlo al fuego
Pero Jeremías no puede como profeta dejar de hablar, 

“Me sedujiste Yhv y me venciste, me decía no hablaré, pero eras en mí, como, Fuego abrasador”
Ay Jeremías, sin saberlo anunciaba ya Pentecostés, cuando el Espíritu Santo, que hablo, y, habla por los profetas, se manifestase en lenguas de fuego

Ese Fuego divino, que no permite callar la injusticia, la mentira, que enfrenta al hombre con su maldad, y, con el castigo que él mismo, se dará, pero pocas veces los hechos suceden en vida del profeta, que como Jeremías es visto como un loco

Jesús será identificado con él
Aunque la Biblia no dice como murió, sin embargo la Tradición, dice que murió lapidado a los 72 años

Vería a su pueblo marchar cautivo a Nínive, al rey ciego, a los príncipes muertos

Pero daría un mensaje de esperanza, si no se revelaban volverían a reconstruir Jerusalén, ahora ya sabían que Dios si cumplía lo que decía Jeremías, habían sido ellos y sus reyes los que se habían  fraguado su desgracia

¿Y, ahora escuchamos a los profetas, y, los profetas tienen el valor de hablar, o saben apagar El fuego del Espíritu?