“Donde llega María, está presente Jesús. Quien abre su corazón a la Madre, encuentra y acoge al Hijo y se llena de su alegría”. (Benedicto XVI)
No precisa comentario, esta gran verdad dicha por el anterior Papa, el Papa Benedicto XVI, cuando la relación de Fe es con María, con María de Nazaret, con La María del Evangelio, la Esposa virgen de José, es imposible no encontrarse con Jesús, ella siempre conduce a su Hijo, bueno, están juntos
Lo malo es que a veces, no damos culto a La Virgen María, sino a un ídolo femenino que nos hemos fabricado, y, le llamamos como a Nuestra Señora, pero no lo es, y, clara esa falsa María, no, nos lleva a Jesús
Modos de conocerla, hay muchos
Devoción a María, que lleve a despreciar, o no obedecer al Santo Padre es falsa
Devoción a María, o supuestos mensajes marianos que hablen del fin de La Iglesia, es falso, va contra La Biblia
Devoción a María que lleve al racismo, al antisemitismo es falsa
Devoción a María, que lleve a odiar a otros cristianos, es falsa
Devoción a María que aleje de la Biblia es falsa
Devoción a María que aleje de los Sacramentos, de la observancia de La Ley de Dios es falsa
Devoción a María que la ponga por delante de Dios, a su altura, o que la convierta en una máquina expendedora de milagritos y tontás es falsa
Ahí no vamos encontrar más que nuestras tonterías
Pero en la auténtica fe mariana. Si encontramos a Jesús, quien junto con su padre humano no biológico, José, y, su hermano adoptivo Juan, es uno de los primeros devotos de su Madre
Además María no es sólo intercesora como Santa Isabel por ejemplo, es también co-mediadora con su Hijo.