“un judío de 93 años
sobreviviente del Holocausto dijo que vio personas que llevaban a Dios dentro,
vio santidad y pureza, allí también
estaba Dios”
Fue en un programa de Shalom, el
programa judío religioso, este viejo, como los antiguos profetas, por algo es
de su raza, proclamaba una gran verdad, allí, en un sitio ideado por los
servidores de satán, donde sólo había muerte, odio, destrucción, allí estaba
Dios, en muchas personas, y, en esas personas había santidad, y pureza, pureza
que nada tiene que ver con lo sexual; pureza que es la confianza absoluta en
Dios, y, por Dios en el ser humano, por eso, se ayudaban, por eso muchos
estaban allí por haberse puesto en el sitio de otros, haber ayudado, no haber
delatado, era el caso de los cristianos, de algunos líderes políticos
Pero el hecho de que este judío
lo notase, y no lo achacase a otras cosas, es que es un hombre que conoce a
Dios, un hombre de oración, al que no dudo Jesús su paisano, recibirá un día en
el Cielo con un fuerte abrazo, de judío a judío
Pero lo mismo que había santidad
en los campos de exterminio nazi, la hay en Corea del Norte que le gana a los
nazis por goleada, allí los cristianos sufren por su fe, y no por ello dejan de
proclamarla, aunque sea dese las letrinas, si Dios está en todas partes, si
nosotros no lo velamos