No importa no contar para la
gente, si se cuenta para Dios
Duele que te ninguneen, mucho si
es la familia, que no cuenta contigo, a veces más si parece que cuenta, no es
agradable ser el pariente pobre, porque te sientes humillado
Hasta en los regalos, te regalo
esto, porque lo necesitas, no digamos si dices que te das un pequeño
capricho, enseguida sale el pariente que
te recuerda que eso no lo necesitas, y, te entran ganas de decirle, que se
callé, pero no puedes porque hace poco,
te hizo un favor, una ayuda
Es malo ser ninguneado por los
amigos, que no te invitan, o dicen, “a ti no te gusta verdad”; pero lo es más,
los que preguntan por tus cuentas, los que dicen aquí la tienen, o lo tienen
con una paga de 100 €, mira como vive
Duele menos pero duele, que en
foros donde llevabas tiempo, te ignoren, y te contradigan sin sentido
Duelo pero ya digo menos, el face
no duele nada, si uno es normal
Duele que a nadie de la familia, amigos, conocidos le importe lo que haces, lo
que opinas, y, que hasta te usen de monito de feria, pero nada de eso importa,
si tenemos fe, y sabemos ver a Dios a nuestro lado
Porque para Dios si contamos
