sábado, 18 de febrero de 2017

Sin, su Sí, no habría sido posible, (Abraham, Moisés, María)




Sin, su Sí, no habría sido posible, Abraham, Moisés, María
Si, Abram, hubiese seguido en Ur de Caldea, le hubiese dicho a Dios, “No me líes, no me compliques la vida, se hubiera quedado con sus dioses de toda la vida, nunca habría existido el pueblo de Israel, ni Moisés, ni María, y dentro del plan de salvación que se nos ha revelado, Jesús nunca hubiera nacido, y nunca hubiéramos sido redimidos
El primer paso de nuestra salvación, dependió del, “Si” a Dios de un  cananeo pagano
Si Moisés no le hubiera hecho caso a Dios, y, liberado a su pueblo, hubiese sucedido lo mismo, la fe judía ya débil se acabaría absorbiendo por la fuerte religión egipcia
El Sí de Moisés, a Dios fue otro paso en nuestra salvación
Pero si con el Sí de Abram, ahora Abraham, el de Moisés, aquella jovencita llamada María; le hubiese dicho a Gabriel, “lo siento, pero tú no me complicas la vida, búscate otra”
El Verbo no se hubiese podido encarnar, Jesús no habría nacido, y todos, todos estaríamos condenados, enemigos de Dios para siempre
María como sus antepasados, sólo dijo “Si”, Fiat; pero con eso lo dijo todo, trajo la Salvación al mundo
A veces, bueno a veces no, siempre lo que Dios espera de nosotros, es simplemente que le digamos, “Sí” confiemos en Él, y le dejemos hacer, que no indica pasividad

Aprendamos de Abraham, de Moisés, pero sobre todo de Mamá María