Dios lo puede todo, menos dejar de amar
Gabriel le dijo a María, “que no había nada imposible para Dios”, Dios lo puede todo, pero esa Omnipotencia a veces la hemos entendido mal, porque se ha explicado mal; y, alejó a muchos de Dios
Se hablaba de la Omnipotencia de Dios, como la de una especie de titán, al que nadie le podía toser, que podía destruirlo todo, ante él que había que temblar porque te mandaba al infierno, por un quítame allá esas pajas
Se entendió mal, él, “cosa terrible es caer en manos del Dios vivo”; como si el apóstol, se refiriera, a que podía destruirnos, que nos vigilaba para condenarnos, olvidando que no puede hacerlo
No, Dios no puede hacer todo, no puede hacer el mal, no es que no quiera, es que no puede, no puede porque es el Bien infinito, de hecho el mal no existe, es sólo la ausencia del Bien
Un ave no se puede comportar como un mamífero, ni al revés, ningún ser puede obrar contra su propia esencia, pues dejaría de ser, en el Ser infinito, que es, y, no poder nunca dejar de ser ese presente; nunca puede actuar en contra de su naturaleza, y, su naturaleza es el Amor, Dios es Amor, no es que ame, infinitamente, no, es que es Amor, por tanto nunca puede dejar de amar, y, precisamente por se Amor; nos hizo libres, y, por ser Amor respeta hasta el máximo nuestra libertad, y, si tozudamente elegimos una eternidad sin él la respetará, nos quiere con Él, porque nos ama, pero por lo mismo, no, nos quiere forzados
Es terrible caer en sus manos, porque como decía aquel anuncio de un coche, una vez que lo pruebas, no puedes dejarlo, Dios es lo mismo, los místicos que son los que experimentaron más de cerca su amor, ya no se puede vivir sin Él
Que le pregunten, a Pablo, Juan, Pedro, pero sobre todo a María de Nazaret, y, a Jesús de Nazareth, en cuanto hombre