miércoles, 5 de diciembre de 2018

Propiedad de Dios


Los seres humanos sólo somos propiedad de Dios

Es decir nadie, nadie nos puede separar de Él, ni la muerte, ni el pecado, ni el Infierno, nadie, sólo nosotros mismos. Lo dice El Espíritu Santo, pero hay mucho más

Nadie puede dar a otro ordenes o mandatos en contra de lo que Dios quiere, y, si las da, no se obedecen

Nadie puede disponer de la dignidad de otro, de su vida, ni con el permiso del mismo sujeto

Nadie puede decidir que un hombre, un pueblo, no es digno de vivir

Porque el único dueño del ser humano, desde su concepción es Dios