La Venida del Espíritu Santo
La Venida del Espíritu Santo, es consecuencia de la muerte
redentora y de La Resurrección de Jesús.
Al ser Dios, ya estaba en el mundo, venía y sigue viniendo
En la Biblia hay venidas especiales, hay más de un
pentecostés.
El primero está en Juan, Jesús antes de morir pone su
Espíritu en Manos de su Padre, cierto es que en cierta forma se refiere al alma
de Jesús, pero muchos Padres de La Iglesia, ven también al Espíritu Santo, que
es el Alma del Cuerpo místico (La Iglesia), y, el Amor increado del Padre y del
Hijo, y, Jesús lo entrega al Padre, porque el Padre está en el corazón de los
hombres.
La segunda venida, también está presente Jesús, Jesús
resucitado se hace presente en medio de los suyos, que estaban reunidos con “las puertas
cerradas”, atrincherados, por miedo, pero esto no le impide a Jesús ponerse en
medio, exhalar su aliento sobre ellos, y, decirles, “Recibid El Espíritu Santo,
a quien perdonéis los pecados les quedan
perdonados, a quien se los retengáis les quedan retenidos
El Don de perdonar a La Iglesia, pero no sólo está aquí el
Sacramento, de la penitencia, perdonar es difícil, es más es imposible; porque
perdonar no es mirar para otro lado, es acoger de nuevo al ofensor, y, eso sin la ayuda del Espíritu Santo de su
Fuerza, no se puede hacer
Y, por último La Venida que narra, Hechos II
“El Primer día de la Semana (domingo). Están todos reunidos
con María, en una casa, con las puertas cerradas, por miedo, de pronto un
Viento fuerte, sacude la casa de arriba, abajo, El Viejo Judaísmo es sacudido
en sus cimientos, y, todos empiezan hablar en un lenguaje que entienden todos
los presentes, que son todos judíos de religión, pero de distintos pueblos y
culturas
Al principio los toman por borrachos. Pedro se levanta y
defiende a los que están con él, y, empieza a contarles que se está cumpliendo
lo que anunció el profeta Joel, les echa en cara, que mataran al Mesías a
Jesús, a quien Dios resucito, y, aquellas gentes que venían de la diáspora que
nada sabían de Jesús, ni de lo que le había pasado, le preguntan a Pedro, qué
debían de hacer, “Qué hemos de hacer”, (Fue la primera audiencia papal)
Pedro los manda bautizarse en el Nombre de Jesús, Aquel día
el Espíritu Santo introduce 3.000 más en
La Iglesia, ya éramos, 3120. Seguirá y sigue viniendo.
Por cierto el Pedro que habla ante tanta gente, es el mismo
que 52 días antes había dicho ante una simple criada de Caifás que no sabía
quién era Jesús.