“No volver atrás aunque en su momento fuera bueno”
Cuando en terreno apostólico, vocacional se ha escogido un
camino, una actividad, escogida ante Dios, en oración y, se han dejado otras
porque no era el momento, no se debe
volver a lo de antes, aunque fuera bueno, y, fuera incluso más
placentero, más fácil que lo actual, hay que seguir en el camino emprendido, en
la actividad tomada, aunque sea difícil,
salvo claro esta excepciones
Por eso las decisiones deben tomarse con prudencia y
oración.