El Nacimiento, la adoración de los pastores
A mi, me gusta más El Libro que las revelaciones de Santa X,
o de Fulanita, me gusta la sencillez, María se pone de parto, y, da a luz a su
hijo, lo pare, como cualquier madre, y, posiblemente con dolor, si no tuvo
pecado original, es porque fue redimida, no porque no lo hubiese tenido de
ningún modo
Dios conserva la virginidad de María, ningún hijo deshonra a
su madre al nacer, la deshonra y para siempre si no nace, si ella lo mata en su
seno, o lo mata al nacer
Yo creo en la virginidad de Santa María, pero no en
genitalidades absurdas, María es Virgen porque su cuerpo y su alma son
propiedad exclusiva de Dios
Nace el niño y Maria lo envuelve en pañales, y lo acuesta
Fuera los pastores que tenían mala fama, por no observar las
leyes dietéticas, y hacer alguna trampilla, reciben una alocución, un ángel les
anuncia que les ha nacido El Mesías el Esperado, su Salvador en la ciudad de
David, la señal, “un niño en pañales”, la cosita más indefensa que ni se puede
salvar él, ellos acuden, y, cuentan lo que han visto, y, María lo piensa, y
repiensa, esta descubriendo aunque siempre lo intuyo, que su Dios es Amor, y,
que también es humor, no aviso a ningún
fariseo, a ningún sacerdote, aviso a los que nadie quiere, si entonces en el
Cielo hubiera Facebook, habrían protestado contra Dios
