Cada día he de purificar mi concepto de Dios, como la
samaritana reconocer “no tengo marido
Cada día, no se refiere al día astronómico, sino a cada
momento consciente de la vida, repensar a Dios, purificar el concepto que me he
formado de Dios, y, rogar a Dios me perdone por haberme hecho un ídolo, y,
acoger al verdadero Dios
Debo hacerlo por Jesús, y, con Jesús de la mano de María,
porque la Salvación viene de los judíos de estos dos judíos, Jesús y María
Debo reconocer que lo que confieso de Dios es erróneo, y,
pedir perdón por ello, pero al mismo tiempo confesar lo mismo pues no tengo
otra cosa
Y, mi Dios es Vivo no aprehensible, no lo puedo agarrar,
pues no es un ídolo que se está quieto
Como la samaritana, debo reconocer que lo mismo que La
esposa adultera de Oseas, no tengo “marido”, pues le fui adultera, me fui con
otros maridos, es decir con conceptos de Dios hechos por mí, misma
Y, descubrir que Dios el Esposo, siempre viene con los
brazos abiertos, al perdón, al abrazo
Que todo el mundo es su Templo, pero sobre todo el corazón
del ser humano
Pero con Jesús y María
So pena de adorar un ídolo al que llame dios