Hacer el bien no para propia gloria sino para gloria de Dios
Hacer el bien no para propia gloria sino para gloria de
Dios, y, esto quiere decir hacerlo oculto, pero si no es posible que sea oculto
hacerlo igual, sin música ni fuegos de
artificio, pero si son inevitables adelante
Significa no hacer el bien previsto, bien de cuadricula,
sino él que Dios por el prójimo quiere, a veces coincidirá con lo previsto,
otras no, no importa
No se trata de que los demás vean lo buenos que somos, sino
que experimenten el Amor de Dios, nosotros solo instrumentos
El ordenador con él que estoy escribiendo, no tiene derecho
a apropiarse lo que escribo como propio, y, en puridad tiene más derecho que
cualquiera a apropiarse del bien que hace a otros, como propio, cuando en todo
lo bueno es Dios quien obra
Y, por cierto no importa si quiera si se escandalizan los
fariseos