Dios se sirve de sus criaturas para ayudar a otras criaturas
A Dios no le gusta aplastarnos con su Poder, ni para ayudarnos, por ello se sirve de otras criaturas, que en ocasiones llamaremos “Causas segundas”, para ayudar a otras criaturas.
A veces en el caso, de la ayuda que los distintos miembros de la creación prestan al ser humano, si excluimos a los ángeles, no es ni consciente en un cien por cien, por parte de los que la prestan
En el caso del ser humano hacia otros seres humanos, aunque haya casos en que no sea consciente, en la mayoría si lo es; lo que ya no suele ser tanto, que él que ayuda sepa que es un instrumento de Dios, y, pocas veces él que recibe la ayuda, es consciente de que debe agradecer a quien le ayudo, pero más a Dios, pero más a aquel que se sirvió de Dios para ayudarle
Cuando se trata del cuidado de animales o plantas, muy pocas veces somos conscientes de que somos “Las Manos de Dios”, para cuidarlos.
Es tanta la voy a llamar “pasión de Dios”, por cuidar a sus criaturas por medio de otras, que para salvarnos, solicito “el permiso de una criatura suya, María, para hacerse hombre en su seno, y, así como hombre, y, por ello criatura, no sólo redimir al hombre, a todos los seres humanos, sino rescatar la Creación entera”