Dios hace completamente nuevo, al que se deja amar
Sí nos dejamos amar por Dios, su Amor nos recrea, nos mete en “Seno materno”, su Misericordia, y, allí, nos gesta de nuevo, nos hace enteramente nuevos, tanto que es como una resurrección, al que le pasa, nadie lo conoce, pero todos ven, que ha cambiado, porque de pronto, era embustero, y, ahora vive y dice la verdad, porque robaba de mil formas, y, ahora no sólo no roba sino que comparte
Porque era un blasfemo, y, ahora hace el bien, para prodigar que todos alaben a Dios
Porque justificaba la muerte y, ahora defiende la vida
Era un cobarde que negó a su Rabí ante una criada, y, ahora pide lo dejen morir crucificado cabeza abajo, para dar la vida por su Rabí, que sabe su Señor
Era un perseguidor, que sujeto la ropa de un muchacho inocente lapidado por su Fe, quería acabar con Cristo, y, proclama que su vida es Cristo, y, todo lo que no lleve a Cristo basura
Son solo muestras, de lo que puede hacer el Amor de Dios, si le dejamos.