Toda la vida tiende al encuentro
con Dios. Cardenal Ratzinger pp emérito. Benedicto XVI
La frase lo dice todo, y, es enteramente cierta
Desde el seno materno Dios nos
forma, nos sostiene y, nos dirige a él
Nacemos para servirle, y, amarle
la vida no tiene otro fin, es como un internado donde nos preparamos para no
desentonar en nuestra Casa el Cielo, por eso algunos se van tan pronto, ya
“habían completado los estudios”
Y, de igual forma que sería una idiotez que en un internado, en un
colegio, protestasen porque se va el alumno al terminar los estudios, lo es,
aunque Dios lo entiende que protestemos por la muerte de un ser querido
Pero dejando la muerte, todo lo
que hacemos esta para conducirnos a Dios, y, si no es así, es tiempo perdido,
menos mal que hay academia para recuperar, “El purgatorio”