La primera tentación poner a Dios a nuestro servicio, a mi
servicio
Fue la primera tentación en el
Paraíso, “Así qué os ha dicho Dios, que
no comáis de ningún árbol?, Es decir, “Vamos con qué derecho os prohíbe comer
lo que os dé la gana, con lo bien que os
portáis aquí los dos, para qué quiere los árboles.
Luego visto el éxito satan, la
repitió más veces, una le fallo el truco. Se encontró con un joven judío, que
tras bautizarse como cambio de vida en el Jordán, estaba ayunando y orando a
Yhv en el desierto, un joven audaz y
atrevido, que llamaba, a Yhv, a Dios, aba, es decir , “ mi papito”
Satan, se dijo, “Menudas
confianzas, se cree hijo, del Otro, y, si lo es, algo así tenía en su Mente,
todo para hundirme, luego el Malo soy, yo, que sólo reclamo lo mío, pero que
veo, ay que le dio un mareo, es que no se puede vivir sin comer, salvo que seas
un espíritu, voy darle un consejo, si es hijo de Dios, que mande que las
piedras se vuelvan panes. Y, asi se acercó al joven y le dijo
¿sí eres hijo de ¨Dios, di que
estas piedras se conviertan en panes?, El joven ni lo miro, sólo
respondió, “ El hombre no vive solo de
pan, vive de toda Palabra que sale de la boca de Dios”
Satán se retiró había fracasado,
lo volvería intentar
A nosotros a mí, a ti, al otro,
también nos viene con la misma cantinela
Para qué portarse bien, mira
otros que viven como viven, que bien les va
Dios ya podría agradecerte que
incluso vayas a Misa a veces que no es domingo
Pero para qué le pides nada, si
no te escucha
Promete esto y lo otro, así sabrás
si quiere oírte o no
Si quieres subir en la Sociedad,
o que te acepte este o el otro, deberías cambiar un poco, y, así a veces habrá
que fingir una piedad que no se tiene, otras que ocultarla
Otras veces simplemente hace la
pregunta tonta
Para qué sirve orar con La Biblia
Para que sirve rezar el rosario
Para qué sirve….
Siempre la tentación de Dios a mi
servicio, es la primera luego vienen las otras tres
Israel también las tuvo en el
Desierto les dio el Mana, y, exigieron carne
Solo Jesús venció, y, tú, yo,
tenemos que vencer con él