martes, 14 de agosto de 2018

El valor de la pobreza


El valor de la pobreza, no de la miseria

Ante Dios tienen preferencia los pobres

Los pobres no los miserables, ser miserable en cualquier sentido no es ninguna bendición, ni bienaventuranza

El pobre de Dios, que no es tampoco el apocado, es el que pone toda su vida en manos del Señor, se confía a Él

No que no tenga miedo, ni dudas, claro que sí

Pero sabe que el Padre siempre esta ahí, aunque no lo “vea”, en ese momento

El Pobre de Dios da a la riqueza el valor que tiene, es decir cero patatero, solo vale para otras cosas, si son buenas para el bien

No es que desdeñe el dinero, hacerlo sería soberbia, pues somos seres limitados

Pero tampoco lo adora, no le hace un altar y, en el cual le ofrenda su conciencia y su vida