sábado, 27 de febrero de 2021

Mercadeo en el templo


Mercadeo en el Templo

“Mi casa, es Casa de oración, y, la habéis convertido en cueva de bandidos”
¿Mercadeo en el templo, en la iglesia, mercadeo con Dios?
No se trata de que en algunos sitios vendan, estampas, aunque no me gusta, no, yo estoy haciendo una reflexión personal, y, por eso me pregunto si mercadeo con Dios
Si mi oración, mi trato con el Señor, es un “te doy esto”; si Tú  me das, Esto
Me porto bien, pero exijo
Vengo a Misa para
Si he convertido a Dios en una especie de máquina traga oraciones, que del mismo modo, que la máquina expendedora,  me tiene que dar la coca cola, si le mete el dinero que vale, Dios está obligado a darme lo que le pido, si a cambio doy, mis rezos, mis buenas obras
Que error tan grande, y, sin embargo, cuantas veces lo viví
Olvidando que todo es Gracia, todo es Don, Dios mismo
Que como el Espíritu Santo, hace decir al salmista, “Como pagaré al Señor, todo el bien que me ha hecho”
Que Dios nada me debe, soy yo, la deudora con Él, deudora que no puede pagar, por eso ha de pagar Jesús por mí, que  por ser criatura, estoy obligada a obedecer, como le obedecen los demás seres creados, sin que por ello tenga que pagarme, nada,  que bien nos lo recordó Jesús cuando dijo
“el que, tiene  un esclavo en el campo, le dice,  sírveme la mesa, y, luego comes  tú, y, no por eso le debe nada al esclavo, del mismo modo, vosotros, cuando hagáis lo mandado, decid, sólo somos unos esclavos que han hecho lo que tenían que hacer”
Claro que nuestro Dueño, es también  nuestro Padre, y, nuestro Hermano, y, el Amor lo vence, y, es Él quien nos sirve, y, hasta se da de comida, pero esto es Gracia, es Don, no podemos exigir, no podemos mercadear con Dios
Por eso, la única persona humana santa, cuando Dios le pidió, por medio de Gabriel que fuese la Madre del Verbo encarnado, no hizo una lista, de todo lo que exigía por ello, por aquel gesto de bondad, simplemente dijo
“Yo soy la Esclava del Señor, hágase en mí, lo que has anunciado”
“Soy una Esclava, Gabriel, a un esclavo se le manda, no se le pide permiso”
Tal vez, por eso,  es María, La Señora de todo lo creado, porque supo siempre su lugar ante Dios, y, supo no mercadear, cuando  pide el vino en Cana, sólo dice “No tienen vino”
Otra hubiera dicho, “pues hijo, para una cosa que te pide tu Madre…”
Y, Jesús cuando ora en el huerto, igual no mercadea con el Padre, sólo dice, si Puedes, y, Quieres