“Dios no perdona, porque nunca nos ha condenado, frase de una película, relación con el hijo pródigo y su Padre”
En el telefilm, “Tierra de ángeles”
La protagonista esposa de un Pastor, pronuncia esta frase, ante el grito de su marido, que la incita a pedir perdón a Dios
“Dios no perdona, porque nunca nos ha condenado”
La frase puede parecer hasta herética, pero reflexionando un poco, recordando que los que nos condenamos somos nosotros mismos, y, yendo al Evangelio a Lucas, sobre todo, y, a Juan
Vemos que es verdad
Cuando el hijo de la parábola llega a casa, su Padre le sale al encuentro, como si en lugar de volver con las orejas gachas, volviese de un viaje
El hijo si, llora, no pide tampoco perdón, porque es posible no piense merecerlo, sólo pide el puesto de un criado
Pero el Padre, en ningún momento dice
Que le haya perdonado, la palabra perdón no aparece por ningún lado, lo que hace es celebrar el retorno del hijo, e invitar al otro hijo, por eso le restituye sus derechos, el anillo era la chequera, el talonario de la época, las túnicas marcaban la clase social; y, hace convite porque está feliz, es su hijo, su pequeño, siempre espero su vuelta, nunca lo condeno, Dios hace lo mismo con sus hijos nos espera para abrazarnos