La Fe activa, o Fe viva
No es saber el Credo, ni saberlo explicar, ni ser apologeta ni teólogo, ni biblista, aunque todo eso sea bueno, y, necesario
Tampoco es formar intelectualmente la Fe, actualizarla por el estudio, y, la oración, lo que es imprescindible, pero no llega, eso no garantiza que la fe sea viva, y, si no es viva apesta como todo cadáver, y, no atrae
Fe viva es creer que Jesús resucito está vivo, y, es Dueño y Señor de todo lo Creado, por lo tanto mi Dueño, y, mi Señor, al que debo obediencia absoluta, lo mismo que al Padre, y, al Espíritu Santo, pues son el mismo Dios aunque en 3 Personas distintas.
Y, creerlo no como se cree el descubrimiento de la penicilina por Mr Fleming
Sino desde el corazón, desde las tripas desde lo más íntimo, poniéndolo por obra
Y, qué es ponerlo por obra, pues muy sencillo. Es hacer lo que Jesús quiere, expresado en el Decálogo, que no anulo, en las bienaventuranzas, en las obras de Misericordia, por las que seremos juzgados, y, todo esto cuando coincida con lo que quiere o está de moda en la sociedad, pues que bien, cuando no luchar en forma pacífica porque llegue a ser. Pero si la fe es viva, sólo importa lo que Jesús quiere, porque es Quien manda.
Y, esa Fe contagia, lleva a que el otro pregunte el porqué, y, después es cosa del Espíritu.
Y, todo esto con otros en La Iglesia, no en la iglesia, y, en la Sociedad siendo levadura, sal. Así se contagia la fe
Pero si somos unos expertos apologetas, biblistas, pero con nuestra vida negamos, y, a veces hasta con nuestra palabra lo que Jesús quiere, somos unos ateos militantes, aunque vayamos en la procesión llevando el pendón, o seamos de la adoración nocturna, diurna
La fe que no tiene obras, se entiende las obras que a Jesús le agradan, es fe muerta, y, los muertos apestan.