Ser perseguidos por tu causa
Ser perseguidos por causa de Jesús, de Dios es el destino de todo cristiano, a veces será a muerte, otras a muerte civil, o a simple burla, pero si todos nos aplauden si a todos caemos bien, o estamos ya en el Cielo, o, de cristiano, no tenemos más que el nombre.
Pero ser perseguidos por causa de Dios de Jesús, no por ser tozudos, por querer imponernos, por no respetar a los demás, no esas persecuciones no valen
y, para ello hemos de saber que tipo de cristianos somos, sí en un insulto a la fe, una burla, un ataque a nuestras creencias cristianas, lo que nos duele es nuestro orgullo herido, sacamos a relucir la tradición cristiana de nuestro continente, o país, no hemos sido perseguidos por su Causa, nos habría dolido igual, si alguien se hubiese burlado de nuestra ropa, nuestros platos.
Pero si nos duele él que nos ha insultado, si tememos por él, si quisiéramos hasta padecer por él en unión de Cristo para que pueda salvarse, si oramos por él, si estamos dispuestos a perdonarle, si decide pedirnos perdón, si nos duele que no conozca la verdad, y, miramos en nuestro interior para buscar la parte de culpa que tengamos o podamos tener, si buscamos La Gloria de Dios, pero no rebajamos a Dios a dios que si le quitan la peana se cae, entonces sí hemos sido perseguidos por su causa, y eso es ser bienaventurado