Oración de petición
Ante Dios tengo que verme como el necesitado de todo, que nada merece, y, todo precisa.
No es lo mismo pedir algo que aunque necesario, no es imprescindible para vivir, o para una vida decente.
Que pedir lo necesario, lo imprescindible para vivir
Y, no es lo mismo pedir a quien por la razón que sea está en deuda con uno, o pueda en un futuro ser él quien precise de uno
Que pedir a quien nada nos debe, ni nunca precisará de nosotros
Y, no es lo mismo pedir lo que vamos a pagar
Pedir a alguien de clase social si no igual, si cercana
Pero cuando el abismo entre el que pide, y él que acoge la petición es muy grande. La cosa cambia cuando quien pide necesita, ser escuchado, acogido, y no puede ir con orgullo, no puede decir “bien me voy con mi petición a otro lado”
Y, él que puede atender la petición nada ganará por atender la
Pero antes de morir de hambre, vivir entre ratas…, uno deja el tonto orgullo
Pues bien cualquier ser humano por alto que esté puede caer a lo más bajo, por lo tanto jamás en sentido absoluto se puede decir que, quien atendió la petición del necesitado. No pasé a ser él necesitado.
Pero todos los seres, los humanos conscientemente, otros no, recibimos todo de Dios, y, cada segundo precisamos del
Para el cuerpo, para el espíritu
Somos mendigos de Dios, nunca podremos pagarle. Sin Él, dejamos de ser o, nos hundimos en el Infierno
Por eso tenemos que pedir con humildad, sabiendo que ante Dios no tenemos derechos
Decir yo a Dios no tengo que pedirle nada ni le pido es una imbecilidad
Dios por supuesto nos da antes de pedir le
Y, Jesús se hace nuestro avalista, nos hace hijos de Dios en él, y nos enseña a pedir en su Nombre, pedir a Dios llamándole Padre, Padre nuestro.
Pedir como el niño pequeño, ser necesitado en extremo de sus padres. Pero su heredero
Pedir como los peques, pedir para hoy, y saber que Dios, da siempre para compartir
Pedir y saber que sí, nos niega algo es porque como peques pedimos tonterías.