Los pasos de Jesús nos marcan el camino. Jesús se nos revela como El Camino al Padre, no podemos ir a Dios fuera de él; Jesús es quien nos reconcilia, nos une con el Padre, el Único Mediador en el pleno sentido de la Palabra.
Pero quedarnos solo en eso, es muy poco; aunque sea mucho, Jesús no es solo el Redentor y el Mediador es nuestro Maestro vino no solo a redimirnos sino también a instruírnos a enseñarnos, para agradar a Dios tenemos no solo que guardar los mandamientos que dió a Moisés, eso lo hacen todos los judíos y nosotros vamos un paso más adelantados, ese paso es imitar a Jesús
Para ello, no nos queda otra que sumergirnos en La Escritura, sí no solo en el Evangelio, que entenderemos mal, sin el Antiguo, sumergirnos en La Escritura y en la oración personal, así lo conoceremos, es decir lo amaremos y con la fuerza de su Espíritu Santo, podremos andar sus pasos, y si caemos él nos levanta