Levantaos no temais
Así habla Jesús a Pedro, a Jacobo, a Juan que estaban como los demás roncando; mientras él sudaba sangre
Levantaos no temáis, ahi llega él que va entregarme, él que va entregarme a mí, Amigo, Su Rabino a la muerte, no a vosotros, así que no tengáis miedo, tengo el mandato del Padre, de que no se pierda ni sufra daño, ninguno de vosotros.
De vosotros que estabais dispuestos a morir por mí, y, ahora temblais, no lo hagáis no teneis porque, soy Yo Jesús, él que va ser atado, y, clavado en una cruz, y, atado a la muerte, para que quedeis libres.
Venga ya esta ahí él que me entrega.
Y, esto no lo dice Jesús sólo a aquellos primeros, me lo dice a mí y, a tí, nos lo dice a todos
Nos recuerda que él se entrega por nosotros, que no somos mejores que aquellos de los que nos gustaría defenderle, si lo fuéramos no tendría que ir a La Cruz por nosotros
Levantémonos pues, y, acompañemos a Jesús allí donde está sufriendo que no es en películas ni en imágenes