No somos cristianos para vivir bien, triunfar y ser felices en el mundo. S. Agustín
Lo malo es que muchas veces lo creemos, y lo peor es que lo disfrazamos de “ser buenos cristianos”, y, así queremos que todos crean, y hagan lo que nosotros hacemos, imponernos.
Nos sacamos derechos de la manga, y, aludimos a qué si este o aquel grupo de creyentes de otra religión, no fueran respetados, como no lo somos nosotros
Recuerdo cuando en RNE se saco el rezo del ángelus, la que se armó, como si se hubiéra prohibido, no, cualquiera puede rezar el Angelus, simplemente se dejo de hacer en la RNE, que no es una emisora católica sino pública
Hubo un tiempo en que se confundía el ser español, con ser católico, el “nacionalcatolicismo”, y, eso como el cesarismo es una herejía, una blasfemia, un sacrilegio, porque católico es él miembro de la Iglesia que obedece a Cristo en el Papa, haya nacido, donde haya nacido, y sea de la ideología política salvo las incompatibles con el ser cristiano que tenga, como si no tiene ninguna.
Mientras que español es el nacido en España, sea católico, musulman, o ateo
Al confundirse se pensaba que todo lo que mandaba el Estado estaba bien, pero llegó la democracia, y, se pervirtío la democracia, y, se hacen leyes en contra de La Ley de Dios, la natural, por el nacional catolicismo, lo obligado sería someterse, o dar el giro coperniquiano, e iniciar una guerra civil, pero ni lo uno, ni lo otro, al ser leyes que van contra la Ley natural, p.e. La del aborto, mi deber como cristiana, es oponerme, empezando por el voto, y, luego todos los medios disponibles. Pero esto no me libra de obedecer como ciudadana, que en mi caso, se da la circunstancias de que también soy católica, no me libra de obedecer las otras leyes justas o indiferentes
Como católica se que programas de tv, radio, películas, libros etc, o en el caso de los que tienen niños o muchachos a que colegios mandarlos o que educación darles, como lo sé, debo hacerlo, pero no tengo derecho a pretender que el Estado lo imponga a los que no lo son; o a quienes lo son pero lo rechazan, no puedo pretender, y, no es cristiano hacerlo, una tv pública etc. a mi gusto católico, simplemente deberé y vale para todo, usar mi criterio para decidir, y, si resulta que apenas hay, o no hay programas cristianos, cine cristiano, pues a otra cosa
Por ejemplo las cruces de la calle, no pasa nada, si se quitan, salvo que sean lugares de oración, la Cruz que cuenta es la de Cristo, y, la que aceptamos como parte de Ella, al vivir en cristiano, y sufrir por ello, al ayudar a los que están sufriendo sean quienes sean
Ojo, no digo que este bien ni mal que las quiten, digo que no se puede hacer de ello un drama, y, si era para recordar a un tipo de muertos olvidando a otros bendito él que la saco
Lo grave es que Cristo siga muriendo de frío en las calles, sea violado en los niños y niñas, se ahogue en el Estrecho, se quede sin casa en La Palma
En España la educación religiosa es un derecho, pero no lo es solo para los cristianos, La Constitución es de todos, por lo tanto el mismo derecho tienen los no cristianos
Dios no precisa porque es Dios mi defensa, pero yo si, como ciudadana tengo derecho a exigir se respete mi Fe no blasfemando contra ella, mejor dicho no haciendo burla o insultando, el mismo derecho que tiene el musulman, o el hindú respecto a las suyas
Naturalmente hay cosas que pertenecen a La Ley natural inherente a cualquier ser humano, y, aquí sí que no podemos transiguir, pornografía, no confundir con erotismo, prostitución, trata de personas, aborto, eutanasia, cambios de sexo en menores de edad, los mayores allá su conciencia, pena de muerte, no es el caso de España, matramonio y patramonio, el primero “señora con señora”, el segundo señor con señor, y, eso porque el matrimonio es anterior al Estado y es unión de hombre con mujer.
Eso no indica que no se deban tolerar las uniones cíviles homosexuales, y, mucho menos que se deba maltratar, vejar, insultar a las personas homosexuales
Simplemente que el matrimonio es lo que es.
Y, si cada vez tenemos menos derechos Bendito sea Dios, donde estamos llamados a ser felices no es aquí, es en el Cielo, en Dios, a donde esperamos llegar por Cristo, aquí tenemos que hacer presente a Cristo y su Iglesia, mediante la vida, la oración, y, la palabra, cuando nos pregunten, con el testimonio, no con la Imposición, para iluminar al mundo, y, que el mundo acepte la Salvación, lo que se impone no se acepta
Vivamos y dejemos vivir, y, protestemos por lo que de verdad importa